Una nueva sorpresa nos llevamos la otra mañana cuando entramos en clase...
¡Había ropa tendida en la cuerda donde colgamos nuestros trabajos para que se sequen! No podíamos dejar de mirarla y de preguntarnos de quién sería, quién la había dejado allí... También había una espada que fue lo que más nos llamó la atención.Estábamos muy concentrados observando esta curiosa indumentaria cuando a las profes algo les llamó la atención: una sombra fugaz en el patio. Salimos y allí encontramos una carta que nos iba a sacar de dudas. En ella un tal Arturo nos decía que estaba bañándose en el río cercano a su castillo y su ropa había desaparecido, que si la encontrábamos por favor se la devolviéramos, pero para ello tendríamos que retroceder en el tiempo y adentrarnos en el mundo de los castillos, reyes, reinas, caballeros...
Comenzamos así nuestro último proyecto del curso: LOS CASTILLOS.
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